“La industria de la música en Colombia es una farsa, no hay tal” una charla sin principio ni fin con Julián Salazar y Franklin Tejedor, Mitú
Podríamos colgarles cientos de calificativos para definir su recorrido musical, pero la mejor opción para conocerlos y entenderlos es su música; canciones como “Nipo” y “Dogo” que hacen parte de su cuarto LP le darán la bienvenida si es su primera vez o un cálido saludo si es visitante frecuente del universo selvático y cosmopolita de Mitú.
¿Recuerdan que en 2012 se acabaría el planeta?, por fortuna para esta y las nuevas generaciones la tierra aún continúa girando al ritmo de los sonidos de Colombia y el mundo, entre estos las vibraciones del cuero y los beats de los sintetizadores de Mitú, quienes empezaron su recorrido justo en esas fechas de incertidumbre.
Hoy, seis años después del primer encuentro sonoro entre Franklin Tejedor y Julián Salazar en donde fue concebido y dado a luz “Potro”, el primer álbum de Mitú, nos sentamos en Cielo Jaguar sin más intención que hablar de la música y de su relación con esta.
“Potro fue como llevar nuestra idea del momento y registrarlo en el inmediato desde nuestra percepción. Para mí fue como mi primera experiencia con la música electrónica” señala Franklin, quien ha venido interpretando los instrumentos de percusión desde su niñez en San Basilio de Palenque. “Potro es la respuesta inmediata a un encuentro. Es la esperanza de un animal salvaje que va a ser muy grande, que va a ser veloz y brioso, pero que acaba de nacer” apunta Julián, exintegrante de la agrupación Bomba Estéreo y quien lo que mejor sabe hace es música.
¿Qué es Mitú?
Julián: la definición de definir es ponerle unos límites a algo. La música que hacemos varía tanto que no puede pertenecer al algo. Mitú es la música que sentimos que tenemos que hacer en el momento, como nos nace. Pero no puede pertenecer a una especie.
¿No es necesario ubicar el proyecto en algún espacio para entenderlo mejor?
Julián: ¿pa´que entenderlo? Cuando alguien le atrae es precisamente porque usted no entiende que es lo que sucede ahí, y no puede comprender porque es algo que se sale de un contexto, es algo que está por descubrirse. Para que encasillarse.
Cuando a usted le atrae algo es como: ¡buff!
“Uno siempre está rodeado de cosas a las que uno reacciona, a las que uno tiene una respuesta, un reflejo, pero yo creo que cuando hacemos música tratamos de silenciar todo eso y simplemente escucharnos a nosotros mismos” Julián Salazar, Mitú.
¿Por qué la música en sus vidas?
Julián: Primero porque es lo único que puedo hacer en la vida. Yo creo que cada uno viene con algo programado
Franklin: Es lo único que hago bien. (Risas)
¿Cuál es su visión más sincera de la música en Colombia?
Julián: ¡es una mentira, es una gran farsa, porque realmente no existe tal! Es una burbuja que se creó hace unos años como de ¡Uyy, Colombia está bien! Obvio hay ciertos niveles de consumo muy grandes como Balvin, Maluma y Shakira. A otro nivel es una mentira. No hay una música consolidada, ni una escena, ni un circuito de una generación que se apoye entre sí.
Franklin: No hay una infraestructura para nosotros como músicos independientes.
Julián: Nosotros no somos una farsa, nosotros nos salimos de la farsa. Sí, hay bandas, hay gente grabando y haciendo cosas, pero de ahí a que eso sea un producto que es reconocido fuera del país estamos lejos. Además, tampoco tiene porque serlo, porque no tiene el alcance de penetrar más allá de cierta cultura muy pequeña que se satisface fácilmente.
“Eso de que la música colombiana está en un boom es una farsa”
¿Esta situación es preocupante?
Julián: mucho mejor que hubiera un gran catálogo y que se estuviera consumiendo música adecuada todo el tiempo. Tampoco es preocupante, porque no es que hubo el boom y decayó, es que nunca ha habido.
¿Si jugamos a echar culpas, quienes son los culpables?
Julián: la indisciplina. Hay que ser disciplinados.
¿De un cien por ciento que tan disciplinados se consideran ustedes?
Franklin y Julián en coro: ¡Cien! Un ejemplo de eso es que tenemos en 6 años cuatro álbumes. Y podemos vivir de esto. Eso es disciplina es vamos a forjar nuestro camino. No vamos a recorrer el de nadie.
Sobre las fusiones entre las músicas autóctonas de las regiones y los nuevos sonidos:
Julián: cada vez que se ha hecho música ha sido una profanación a lo que se hacía antes. La música que hace la gente de donde es franklin (San Basilio de Palenque) tiene una herencia africana, pero no es música africana exactamente, es una versión de; y si usted va y le dice al músico africano de hace cien años: ¡vea lo que hice con usted! se va a aterrar y va a vomitar y va a decir: me parece lo peor que se ha hecho en la vida. Así es la música siempre está evolucionando, como la especie.
“Eso es la música, es una profanación constante y nosotros no intentamos conservar nada”
¿Les interesa ser parte de esa evolución, quedar en ese registro?
Franklin: Ya somos. Yo pienso que Mitú ya hace parte de la historia de la música colombiana, y eso ya está plasmado, tenemos cuatro álbumes y un EP.
¿Lo buscaron o fue algo que encontraron en el camino?
Franklin: Fue una consecuencia de hacer música.
¿Cómo ven el futuro de la música colombiana?
Julián: Yo creo que viene bueno. Pero hace falta disciplina.
Mientras conversábamos empezó a llover y aprovechamos a Julián para armar el playlist adecuado para una noche de lluvia, pero además útil para subir el ánimo en cualquier momento:
Acid Pauli – La voz tan tierna
Alice Coltrane – Galaxy in turiya
David Bowie – Tis a pity she was a whore
Dj Boring – Winona
Franklin por su parte nos recomendó cuatro artistas que según su criterio debemos escuchar sí o sí:
Las alegres ambulancias
Soukous all stars
Salif Keita
La fania all stars
¿Para adónde va Mitú?
Julián: para mi es para donde la música nos lleve.
Franklin: seguir hacia el horizonte que vamos hasta donde nos de la vida.