Santa Palabra y su mochila llena de cuentos
Encontrarse con Santa Palabra es una oportunidad maravillosa para conversar de lo que sea y escuchar miles de cuentos. Es de esas citas que son difíciles de terminar por lo entretenidas e interesantes, y en las que el cuento es una excelente herramienta para evadirse de las preocupaciones del día a día y disfrutar de la imaginación. Y nosotros nos encontramos con Cristian Fraga para hablar sobre esta agrupación.
“Que en medio de este aislamiento digital en el que a veces nos tiene la tecnología, todavía nos podamos agrupar como comunidad a imaginar el cuento que nos relata alguien. Esa es la ganancia más grande que tenemos nosotros al mostrar nuestro arte en la colina de san Antonio” Cristian Fraga.
¿Qué es Santa Palabra?
Santa Palabra es una agrupación dedicada al fomento de la narración oral de cuentos. Nos dedicamos a formar un público apto para escuchar y contar historias. Contribuimos a la ciudad de Cali con espacios permanentes de narración oral y a la vez somos una empresa cultural que le da beneficios de todo tipo a la ciudad.
¿Cuál es el equipo que conforma Santa Palabra?
Los pilares de esta agrupación somos tres: Johann Castellanos (El Santo), Sergio Castellanos (que es nuestro Manager, asesor y amigo) y yo: Cristian Fraga. El santo y yo somos los narradores y Sergio es el que se encarga de la parte comercial de la empresa.
¿Cómo se encontraron para formar este grupo?
‘El Santo’ y yo ya éramos narradores ambos por su cuenta, el santo tenia para ese entonces un espacio donde leían cuentos y poemas en un café en San Antonio y a ese espacio le llamaban Santa Palabra. Yo contaba cuentos en la Universidad del Valle y en algún momento los dos quisimos crecer y nos encontramos justo en ese instante de la vida, entonces ‘El Santo’ me dijo que formáramos esta agrupación. Estuvimos un tiempo largo contando cuentos y luego hicimos un viaje por algunos países de Latinoamérica y al regresar nos dio por querer montar una empresa cultural y es ahí cuando le pedimos a Sergio que forme parte del equipo. Sergio se integra y nos conformamos legalmente como empresa ante la Cámara y Comerció, y desde ese entonces venimos trabajando los tres fuertemente.
¿Cuánto tiempo lleva este proyecto?
Como empresa desde el 2012 y como agrupación desde el 2008.
¿Qué ha sido lo más difícil durante estos años?
Creo que encontrar la financiación de los recursos para los proyectos grandes como el Festival de Cuenteros. Siempre hemos querido aportarle cosas a la ciudad, a la gente, y el festival Santa Palabra era uno de esos, lo hacíamos cada año y ahora tuvimos que pausarlo, de las cosas difíciles que tuvimos que sortear fue eso, a veces conseguir los recursos por parte del sector público es muy difícil, el sector privado lo hizo en su momento, pero nuestros sueños necesitan mayor financiamiento.
¿A qué te sabe Cali?
Es una mezcla entre sabor y sentir, porque para mí Cali es música, Cali es una ciudad muy afro, muy mestiza, Cali es una ciudad de salsa, pero también de currulao, de chirimía. También es un ciudad de aborrajado, de empanada y de sentarse en el anden a hablar. Entonces es una mezcla de sabores, sensaciones y sonidos.
¿Qué los motiva?
Hay varia cosas que nos motivan, aparte de querer hacer las cosas bien, una de las motivaciones más importantes es que el público pueda tener una experiencia positiva con nosotros, que el público pueda salir feliz.
¿Cuál es la materia prima de su trabajo?
La imaginación, la creatividad. Y ese es un recurso inagotable. Eso también nos sitúa como una empresa con una materia prima bastante ecológica. También conversar con la gente y observar. Además Hay que leer mucho para entender como estructurar una historia.
¿Cuál es tu libro y escritor favorito?
Si hablamos de Cali uno mis escritores favoritos es Umberto Valverde, lo descubrí este año con Bomba camará y Reina Rumba, dos libro muy bacanos. No todo es Andrés Caicedo.
¿Una experiencia que nos puedan contar?
Hay muchas. El primer viaje que realizamos lo hicimos porque una colombo-española se nos acercó y nos dijo con acento español: Ustedes son muy buenos, pero ¿han viajado? Y nosotros le respondimos que solo aquí en Colombia. Ella nos dijo que tenía unas millas y se le iban a vencer, que si queríamos nos las regalaba.
Nosotros no les creímos mucho y a los días nos llama y nos dice: Necesito su número de cédula para enviarle los pasajes y que me definan si quieren ir a Cuba o a Chile, dijimos hagámosle a Chile y de ahí nos venimos por tierra y así fue que hicimos nuestra primer gira, entre incertidumbre y ganas.
Nos regalaron los pasajes pero nosotros no teníamos ni pasaporte ni dinero ni nada. Entonces hicimos una obra de teatro para recaudar dinero para el viaje y nos fuimos. Estuvimos en Chile y de ahí pasamos por Argentina, Bolivia y Perú.
En rosario argentina los cuenteros son en su mayoría mujeres que pasan de los cuarenta y cinco años, porque ya son las jubiladas que ven en el relato de cuento una opción para no aburrirse. Una de ellas nos mira y nos pregunta: ¿Los dos cuenta juntitos? ¿Y cuánto se demoran? Nosotros de respondimos que entre una hora y cuarenta y cinco minutos. Mira querido yo te voy a decir algo – nos dice ella – a nosotros nos enseñan en los talleres que después de veinte minutos se te aburre el público, así que tenelo en cuenta. Pero El Santo hizo una hora y yo otra hora y la gente salió feliz. Al final ella se acerca a nosotros y nos dice: Ustedes son fenomenales.
¿Cómo ha sido el recibimiento de su trabajo aquí en Colombia?
Aquí sentimos un respaldo muy grande por parte del público caleño y nosotros estamos felices de hacer algo mágico, y digo mágico porque a pesar de tener tanta tecnología todavía la gente se reúne debajo de un árbol a escuchar cuentos.
¿Qué se encuentra el público en sus presentaciones?
Principalmente se encuentra con un contenido propio, un contenido trabajado. Son unos cuentos producidos por nosotros y con un contenido de calidad.
“Es muy loco que la gente nos pregunte a que nos dedicamos para vivir y nosotros le podamos decir que nos dedicamos a contar cuentos, es como ¿En serio se puede vivir de eso? Y sí. Se puede vivir de lo que usted quiera siempre y cuando lo haga con amor y con pasión”.
¿Te gustaría escuchar los cuentos de Fraga y el Santo?
Consulta la programación en su página web y síguelos en sus redes sociales. www.santapalabra.org